El transactivista heterosexual: el homófobo moderno.

 

El transactivista heterosexual: el homófobo moderno. La variedad de redes sociales de ataque a gays / The Straight Trans Activist: The Modern Homophobe. The social media variety of gay bashing. Por Sue Donym. https://suedonym.substack.com/p/the-straight-trans-activist-the-modern 

 

El difunto, el gran Phil Ochs tiene una canción. Se llama "Ámame, soy un liberal". Refiriéndose así: En cada comunidad estadounidense existen diferentes tonos de opinión política. Uno de los más siniestros de estos son los liberales. Un grupo audaz sobre muchos temas, diez grados a la izquierda del centro en los buenos tiempos, diez grados a la derecha del centro si les afecta personalmente. 

Aquí tenemos, pues, una lección en lógica de seguridad. Tan cierto hoy como cuando fue escrito. 

Observo que esa canción, sin lugar a dudas, ha envejecido bien. En efecto, sirve para una forma perniciosa de transactivista que vemos muy poco mencionado. Quizás 'mencionado' es un mal término. 

Me centraré en tratar de describir y codificar este homófobo moderno. Díez grados a favor del transactivismo en los buenos tiempos, diez grados para la escala TERF de Julie Bindel cuando les afecta personalmente. O "TRA en las calles, TERF en las sábanas." 

Estoy hablando del transactivista hetero. Entre ellos encontramos desde no binario de pelo azul, sin embargo, de alguna manera muy femeninas Kais y Aidens, que publican en las redes sociales lo homosexuales que son, puede que hasta habiendo invadido algunos espacios y organizaciones LGBT para centrarse en sí mismas pero al final del día vuelven casa y en la oscuridad follan a sus peneportantes novios en la postura del misionero. Los barbudos hombres heteros que publican sin descanso 'las mujeres trans son mujeres' pero admiten que no se acostarían con uno puesto que quieren "hijos biológicos." 

Los delegados de partidos de izquierdas que asienten, los aliados que abogan sin cesar por los temas trans no les interesa escuchar ninguna oposición. Al final del día, para la mayoría de los heteros, sino para la gran mayoría, el tema trans lo considera más o menos grosso modo completamente academicista. 

Para los transactivistas sus vidas queda algo así como mayormente sin cambios por su apoyo: nunca verán las consecuencias de sus acciones. Para lesbianas y gays es otro tema completamente diferente. ¿Qué vas a hacer tú cuando eres una minoría y la mayoría empieza a decir lo que eres tú y a infiltrarse en sus espacios y grupos? Simplemente te ves forzado a salir de ahí. No nos salen las cuentas para contraatacar. 

Es fácil para un hombre hetero estar totalmente relajado durmiendo con un transfemenino cuando sabe que, en comparación con la cantidad de mujeres heteros, los transfemeninos son una pequeña minoría y los transfemeninos interesados sexualmente en otros hombres son una minoría aún más pequeña. 

Es muy diferente para la lesbiana — una minoría invadida por una mayoría no tiene esa opción — un hombre hetero en la vida tendrá que husmear en una plétora de pollas tratando de encontrar mujeres. Tampoco se esperará que tan sólo soporte que se les expulse de la mayoría de plataformas cuando tengan objeciones al husmear en una plétora de pollas cuando no estén interesados en la polla. Eso, meramente, no va a pasar. Cuando sois mayoría, sois más bien inmunes a la destrucción total de vuestra comunidad por dicha mayoría, ¿no? La mayoría de las consecuencias para estas personas son ante todo teóricas. 

No solo nunca se verán obligados a desplazarse a través de una polla cuando están a la búsqueda de un coño, sino que jamás verán a una pareja muy querida decir que porqué ella te quiere y tú la quieres de veras tenía que ser un hombre — y tú esperas que con toda seguridad se apoye eso sin quejarte nunca pues se celebra su deseo de autolesionarse y heterosexualizar a los dos se festeja. Nunca tendrán que ver a una mujer hetero de cabello azul en la televisión hablar por ellos. 

Para ellos, el bar gay es una atracción turística, un zoológico de frikis, un lugar para curiosear a los drag queens en lugar de un salvavidas o un lugar seguro para echar un quiqui (ya muy pocos bares gay son realmente "gay" habiéndose convertido en atracciones de parques temáticos de drag queen para heteros). 

Nunca llegarán a un evento que supuestamente es para gente como ellos para encontrar que, en realidad, está lleno de gente que se apropia de su propia identidad diciéndoles que el mero hecho de que tuvieran que adueñarse significa que están más oprimidos y debes priorizarlos. No les cuesta nada, pero les cuesta todo a lesbianas y gays. 

Consideremos, por ejemplo, al promedio 'feminista liberal' en estos tiempos. Podría ocupar un puesto en una unión estudiantil como representante de mujeres o trabajar en una ONG enfocada en mujeres. A fin de cuentas, su trabajo prioriza a otras mujeres heteros, con las lesbianas como ocurrencia tardía en el mejor de los casos, pero ella necesita lograr la necesaria dádiva para los "derechos trans" y de alguna manera lo encuentra muy fácil — mientras ve cómo hacer para asegurarse de que a las lesbianas se pasan por alto, o tan sólo marginadas por su trabajo. 

Cuando eres activista en pro del aborto (como lesbiana, a mi parecer, siempre he encontrado que es un tema un tanto teórico, pero no es más que mi opinión), los homosexuales efectivamente no entendemos. 

Es fácil hablar de "personas" que abortan porque cuando eres una mujer de clase media alta en la universidad no te afecta. No le cuesta nada; al final, para ella, la cuestión de un transfemenino en un albergue para mujeres es teórico. Sin más, de ningún modo lo encontrarán. Es muy posible que en contadas ocasiones traten, en su vida pública o privada, con transfemeninos — por lo que para ellas el "apoyo" a una 'minoría oprimida" está bien. 

Nunca lidiarán con la horripilante Chloe en la noche de baile lésbico fuera de sí porque todas las mujeres le dijeron 'no'. Será abiertamente hostil con las lesbianas, particularmente con las marimachos, y lo disfrazará de transactivismo. Ella solo quiere que te sientas a gusto contigo mismo. 

O las lesbianas que pasan el rato en el espacio de campus LGBT, deberías ir allí. Mi preferido es siempre, eso es nauseabundo, cuando tú deshumanizas a las mujeres como un hombre hetero, este no es un espacio para cosificar a las mujeres cuando, digamos, tú, una lesbiana con ojos y libido, afirmas que una mujer tiene un buen culo. Lo entendemos, Olivia, te sientes incómoda con lesbianas. 

Todos promoverán que los homosexuales "incluyen a los trans" y reaccionarán muy mal cuando expresen que se sienten atraídos por personas del mismo sexo. Al fin y al cabo, incluirían a los trans pero tienen novio/novia. Ay, ¡qué oportuno! No les afecta. 

Puedes apostar que si Chloe blandiera su polla alrededor de Chad Heteroton, el defensor de los derechos trans, duraría cinco segundos: Chad Heteroton está a diez grados del nivel TERF de Shelia Jefferies cuando tiene una polla en su cara. Pero para el Sr. Heteroton esa es una posibilidad teórica, no enfrenta la brecha de poder que muchas lesbianas enfrentarían en la misma situación. Entonces puede decirle a una lesbiana que acepte la polla sin una pausa sabiendo que él jamás haría lo mismo.

¿Por qué hacen esto? ¿Es homofobia? Para algunos tiene que ser. Muchos transactivistas heteros encuentran que insistir en sus temas preferidos y claramente su espantajo de los derechos humanos, en que los homosexuales acepten el sexo hetero en su vida sexual. 

Después de todo, el transactivismo es una tapadera fácil para expresar una terriblemente espantosa homofobia ocultada. Para el transactivista hetero es un instrumento fácil para hacer bullying a los homosexuales. Dirán que te apoyan y luego te preguntarán por qué no quieres a los transfemeninos en el bar de lesbianas. 

En cierto modo, están apoyando a los suyos, ¿entienden eso? De manera subconsciente, creo que sí. Eso explicaría el porqué priorizan los derechos trans sobre los homosexuales, te lo aseguro. Pero creo que a la mayoría meramente no les importa. Apoyar los derechos trans significa no tener problemas en el trabajo, significa no tener problemas en las redes sociales, es postureo ético en las fiestas rodeados de otros heteros mientras se mueven por el mundo heterosexual. 

Al final, es puro beneficio, en lo que a ellos respecta. No van a dejar que el bar de lesbianas se llene de golpe de pollas y luego cierren, o que vean a un hombre pajearse en el refugio para mujeres o en la cárcel porque se identificó para entrar. No conocen a ninguna lesbiana, no desde esa mona pareja en la universidad, y el momento que les pillaron con hierba en el coche el policía los dejó ir. 

Es fácil estar de acuerdo en principio con algo que suena bien cuando no te afecta, así que nunca tienes que pensar en las consecuencias. Su hipocresía no tiene ningún coste personal para ellos. Absolutamente nada. Es fácil dar dinero a un GoFundMe, publicar #/ProtegeALosNiñosTrans en twitter o tener una foto de perfil de la bandera trans. 

Nunca verán a su amor cortarse los pechos, ni forzados a la esterilidad porque sus padres están aterrados de que su hijo de cinco años va a resultar gay. No son transexuales homosexuales que dieron su brazo a torcer y de pronto encontraron a George del instituto que les dio una paliza en su día "por ser un mariconazo" que ahora se llama Georgia, todavía casado con su sufridora mujer y ahora les está diciendo lo que los hombres que se identifican mujeres realmente quieren a las organizaciones trans, y echándolos a ellos cuando les dicen que no. Es la forma moderna del homófobo izquierdista. 

Mira, hoy en día, es inaceptable en la alta sociedad ser públicamente muy homófobo. Pero esa inadmisibilidad solo ocurre en la última década más o menos: la muerte de Matthew Shepherd fue en 1998, el mismo año en que Britney triunfó y Tom Brady y Drew Brees, ambos recién retirados, jugaban fútbol universitario en el Big Ten. Esa homofobia no se había ido, tan solo tuvo que encontrar nueva vía de escape. En consecuencia, el pernicioso homófobo moderno. Todavía puedes ser homófobo, solo tienes que hacerlo sin que te vean como homófobo, ya ves. Y lo mejor de todo, ¡serás conocido por ello! 

No te cuesta nada decir "algunas lesbianas tienen penes". Ignora el enorme daño que has causado a la comunidad gay y lesbiana. ¿A quién le importa? No conoces a ningún gay, ¡pero tu Insta ha deslumbrado! Entretanto, ¡has permitido colosales daños! Las lesbianas ya no tienen aplicaciones de citas — están literalmente llenas de tipos de 1,95 que se hacen llamar Crystal y llevan pelucas de Party City. 

Tanto lesbianas como gays han perdido espacios y organizaciones que han girado y les han dicho que no son bienvenidos, que los heteros que se hacen pasar por gays son más importantes y aceptarlos es un deber. 

Es ilegal literalmente que en algunas partes de Australia los homosexuales tengan eventos solo para homosexuales debido al transactivismo, pero ¿a quién le importa, no? No te afecta a ti y esas horribles lesbianas que intentan tener un mínimo de espacio para ellas deberían seguir adelante y ser inclusivas, no les hace daño. Deberían ser más inclusivas… esas horribles lesbianas TERF. Al fin de cuentas, son una plaga en la comunidad LGBTQI+ y tu virtud dio señales en Instagram. 

A pesar de todo, esa es su frase favorita. "¿Cómo te hace daño un hombre que se autoidentifica lesbiana? ¡Tan sólo deja que la gente sea quien es!" Solo puedes decir tal cosa cuando la pregunta es academicista y, a grandes rasgos, no te afecta. 

Eres liberal, crees que la gente debería ser quien es. Olvida que un hombre se autoidentifica lesbiana se apropia culturalmente de la misma biología de otro grupo, olvida que ellos acosan a lesbianas, las hacen sentir non grata en sus propios espacios, hablan por encima de ellas, olvidan que están tratando de redefinir toda existencia ajena para lo que les convengan, o que podrían estar satisfaciendo un fetiche sexual. 

Si reformulamos esa cuestión de "vive y deja vivir" para incluir las consecuencias reales de "dejar que las personas sean quienes son", se transforma en: "¿En qué te lastima dejar que un hombre viole todos tus límites y redefina tu identidad?" Están siendo auténticos. Estás siendo mala y desagradable, estás siendo transexcluyente. 

De todas maneras, ¿cómo es posible que toda un grupito de heteros que se identifican como homosexuales lastime a los homosexuales? Deja a la gente en paz, no te hace daño, incluso cuando perdiste todos tus espacios y organizaciones y llegar a un desfile del Orgullo diciendo que eres gay significa que recibes amenazas y ataques por los monopolizares heteros y sus aliados turísticos. Es puro beneficio, así que ignora el profundo y cruento agujero donde el tuyo solía estar. Pero ¿cuándo no es puro beneficio? Oh, eso no va a pasar. Pero, aún así, no hables sobre el hecho de que cayeron los beneficios, Eso es transexcluyente, ¡fanático homosexual!